Viaje al que le teníamos muchas ganas, ya que era de las pocas regiones de la península que desconocíamos por completo, una zona de la que solo teníamos buenas referencias de quienes ya la conocían.… Más
Por la Vera
La zona de los valles del norte de Plasencia siempre depara sorpresas. A pesar de la infinidad de visitas que hemos realizado con los años, siempre encuentras nuevos rincones, nuevas vistas o nuevos parajes.
En nuestra última excursión pensábamos acercarnos a realizar la ruta de los tres valles, pero cuando llegamos el día estaba feo y frío, y decidimos cambiar la ruta y explorar la zona de la Vera.
Esta ruta por la EX-203 es un recorrido donde vas cruzando infinidad de preciosos pueblos con olor a leña y pimentón, en los que vas encontrando diferentes gargantas de agua que bajan de la montaña. En concreto nosotros fuimos a ver la denominada catarata del diablo y la Garganta de Cuartos.
La primera se encuentra tras pasar la población de Villanueva de la Vera, y es un espectacular salto de agua formado por la Garganta de Gualtaminos en su camino al río Tietar, de las aguas procedente de la Sierra de Gredos.
La Garganta de Cuartos está tras pasar la población de Losar de la Vera,y es es la más caudalosa de la comarca de la Vera. Las aguas provienen de la ladera sur de la Sierra de Gredos además de pequeños arroyos y chorreras como el Matamoros, la Garganta Caballerías, la Hoz, Largarejo o el arroyo Vadillo.
Se utiliza como piscina natural bajo el puente medieval de Cuartos, allí hay una serie de pozas donde la garganta gana en profundidad y es un lugar perfecto para el baño en verano.
Si se dispone de tiempo, recomiendo visitar las poblaciones de Jarandilla, con su espectacular Parador, subir al Monsterio de Yuste, y recorrer la preciosa carretera que te lleva hasta Garganta la Olla.
De Castillos por tierras de Cáceres
En Extremadura, supongo que por su situación fronteriza, existen infinidad de castillos que visitar, algunos no son ya más que un montón de piedras que evocan tiempos mejores, pero existen fortalezas que mantienen sus altivas formas y que incluso se han destinado a unas funciones menos defensivas y más festivas. Ya realizamos una ruta por algunos de los Castillos que se encuentran en la provincia de Badajoz, que podrás encontrar en este blog (Ruta de los Castillos de Badajoz). Esta vez el paseo lo hemos realizados por los alrededores de Cáceres.
La ruta no estaba programada, salimos a dar un paseo en una bonita mañana de invierno, con la sola intención de comer en Cáceres, y terminamos visitando varios de los castillos que nos encontramos a nuestro paso.
De inicio nos dirigimos hacia Jola por la carretera de Valencia de Alcántara, y nos picó la curiosidad al ver un cartel que indicaba una desviación hacia el Castillo de Piedrabuena. Este Castillo lo habíamos divisado a lo lejos muchas veces a nuestro paso hacia rutas por Herreruela. Así que dimos la vuelta y nos metimos por una carretera pequeña y en pésimo estado de asfalto, para ver si dábamos con el afamado castillo.
Después de unos pocos de kilómetros por medio de la dehesa, no dimos con la entrada al castillo, pero pudimos disfrutar de unas vistas espectaculares del mismo emergiendo de entre las encinas. Luego he visto en Googlemap que la entrada al mismo está por la carretera de Herreruela, pero que el camino está cerrado por una valla que protege la entrada del camino, que es de uso privado.
Desandamos el camino, seguimos a camino hacia Jola. Esta zona, asolada por varios incendios, sobre todo uno atroz en el 2003 que dejo los bosques de pinares con una desoladora imagen, nos llevamos la grata imagen de como se está regenerando, y se nota mucho el cambio desde nuestra última visita de hace un par de año. A pesar de algún susto el pasado verano según nos contó un paisano de la zona.
Vuelta hacia Cáceres por la N-521, una de mis carreteras favorita para disfrutar del programa de conducción dynamic de la RT, por su buen asfalto, poco tráfico, y una serie de curvas rápidas donde la RT se encuentra en su mejor entorno.
Tras una agradable comida en Cáceres, tomamos la antigua carretera Mérida-Cáceres, N-630, y disfrutamos de los Castillos de la Arguijuela, el de arriba y el de abajo,que son una pasada, sobre todo el primero, con un estado de conservación espectacular. El mismo se utiliza para bodas y actos promocionales.
Bajamos hasta el Cruce de las Herrerias, para desviarnos hacia la derecha buscando la carretera de Carmonita BA-099, para conectar con Cordobilla de Lácara y el embalse de Horno Tejera, y vuelta para casa por la Roca de la Sierra.
Vila Velha de Rodão, a orillas del Tajo.
Desde Badajoz no hay que hacer demasiados kilómetros para llegar a esta bonita población, ya que se encuentra a poco más de 100.
La ruta es la N426, que pasa junto al Parque Natural de San Mamede, también interesante de conocer. Se puede llegar desde Elvas o coger la N371 desde Campo Maior, para unirse a la N426 a la altura de Arronches. De las dos maneras lo he hecho, pero en esta ocasión tiramos por Campo Maior, que si no eres de la zona, también merece una parada y un café (Delta, por supuesto, ya que aquí está su factoría, y por delante se pasa).
La ruta discurre por las típicas carreteras portuguesas, entre dehesas, y con zonas de arboles flanqueando ambos margenes de la carretera ( en España ya no se suele ver esto, supongo que por motivos de seguridad, pero que bonito es pasar por una carretera con el cielo tapado por la arboleda). Tras pasar Portalegre, tomamos la E802, hasta llegar a Alpalhão, ahí nos desviamos hacia la derecha con destino a Nisa.
Nisa es es una bonita población, capital municipal, que todavía conserva parte de su casco antiguo protegido por un recinto amurallado del que sólo se conservan dos de las puertas: a Porta da Vila y la Porta de Montalvão, ambas declaradas como Monumento Nacional. Sus casas encaladas y con bordes amarillos componen una bonita y tradicional estampa que merece de un tranquilo paseo.
Seguimos por la N18, y nada más salir de Nisa, nos daremos cuenta que la cosa ha cambiado, lo que eran rectas enlazadas con suaves curvas, ahora dejan paso a un sinfín de curvas de poco radio y buen asfalto, que te hacen disfrutar bajo el casco.
La carretera baja para llegar, atravesando un bonito puente metálico, a Vila Velha de Rodão, una bonita población que se desarrolló a orillas del río Tajo desde tiempos remotos. Con 4 pedanías y situada junto a las «Portas de Ródão», un escarpe rocoso a ambos lados del río que está declarado Monumento Natural de Portugal y que constituye el refugio de diversas especies de rapaces, es un entorno espectacular.
Yo recomiendo que antes de entrar en la población, y conforme termines de atravesar el puente, gires a la izquierda, y tomes la carretera de curvas que te sube al castillo de Rodão, una robusta atalaya cuyo origen se atribuye a tiempos del rey godo Wamba, que está situada sobre el impresionante roquedo , junto a la ermita de la Virgen del Castillo. En este punto, y tras el castillo, existe construido un balcón donde las vistas del Tajo son inmejorables e incluso puede contemplarse manadas de buitres leonados que habitan en la zona.
Luego recomiendo que busques la zona de Cais Vila Velha De Rodão, que es un pequeño embarcadero con un puente de madera, donde se puede pasear y observar las magníficas vistas del puente y de las «Portas de Ródão». Existe un restaurante en esta zona.
Sierra Norte de Sevilla
Esta ruta la realizamos el 7 de enero, que fue un día de bastante frío, creo que la mejor época para realizarla debe ser primavera o al principio de otoño.
En enero los castaños estaban completamente si hojas y a pesar de que la dehesa estaba muy bonita, creo que el sitio da mas de si en otra época.
Lo que sí tiene esta ruta son curvas por demás, no en vano, es zona de recorrido de muchos moteros sevillanos, y las motos abundan por doquier.
En especial la carretera A-3301 que une Constantina con Las Navas de la Concepción es un sin fin de curvas derecha izquierda, e incluso peraltadas, donde no encuentras un sólo tramo de recta, y es estrictamente literal, en 19 kms de carretera no llega al kilómetro de recta, y creo que me voy largo.
La pega, que las carreteras están en bastante mal estado, algunas impracticables, como la SE-155, que es un auténtico camino de cabra, y que además te puedes encontrar en esta época del año, como fue nuestro caso, con tramos completos de carretera helados. Menudo canguis pasamos… Esto hizo que no siguiéramos hacia Hornachuelos, y lo dejáramos pendiente para mejor ocasión
En esta ruta, es típica la foto del lobo del mirador de Sierra Padrona y Puerto Quejigo, situado en la carretera SE-179 dirección a El Real de la Jara. En este pueblo además se pueden observar más estatuas de distintos animales de la serranía como ciervo, jabalí, …
Arribes del Duero, Ciudad Rodrigo y Serra da Estrela. Un sinfín de curvas.
Viaje organizado de un miércoles para el viernes de esa misma semana, aprovechando que daban buen tiempo en un otoño muy lluvioso. No somos de viajar en puentes, pero por motivos que no vienen al caso, necesitábamos un viaje para desconectar un poco, y aprovechamos la excusa del Puente de la Constitución para hacerlo.
Tenia ganas de conocer dos zonas de las que me habían hablado mucho y bien. Los Arribes del Duero y la Sierra de la Estrella. Así que buscamos un punto logístico céntrico para las dos rutas, y nos pareció perfecto Ciudad Rodrigo.
Si ya nos conoces, sabrás que nunca vamos a los sitios por el camino más cercano, sino que buscamos el recorrido más bonito, aunque en ello nos vayan 100 kms de regalo. Para esta ocasión establecimos que la ruta para llegar a Ciudad Rodrigo tenía que subir la Sierra de Francia y la Peña de Francia, así que pusimos rumbo a las Mestas en Las Hurdes extremeñas. Nunca me cansaré de hacer la subida de la Sierra de Francia, y van ya tres o cuatro, pero es una subida impresionante que te sube 1.000 metros en ocho curvas en horquilla. Si eres motero, no te deberías morirte sin subirla.
La finalización es el espectacular y cada vez más concurrido pueblo de La Alberca. Desde hace algún tiempo resulta difícil comer en algunos de sus restaurantes, por lo que pasamos de largo y paramos a comer en el Restaurante Casa Tinin, siguiendo la carretera hacia La Nava de Francia. No es una recomendación de este restaurante, en el que no se come mal, es sólo una indicación si no quieres sufrir el estrés que provoca comer en La Alberca últimamente (cuesta hasta aparcar la moto).
Tras reponer fuerzas pusimos rumbo al Santuario de la Peña de Francia. Con una subida espectacular, lo son aún más las vistas que tendrás desde los miradores que existen arriba. Además con el detalle de tener indicado los pueblos hacia los que miras en cada punto. No te lo debes perder. (cuidado con la temporada, pues suele acumular nieve en invierno).
Desde aquí, hicimos el cruce por el Mirador de Lobos, y tomamos la SA-CV-178, carretera que Google marca en naranja en su primer tramo, supongo que por peligro de desprendimientos, que algunos restos vimos en la carretera, pero que pasa por la ladera de una montaña, con vistas espectaculares, para ir introduciéndose luego por un bosque de castaños primero , y un pinar después, para terminar llegando a Ciudad Rodrigo.
El sábado pusimos rumbo hacia la primera ruta, los Arribes del Duero, que es un Parque Natural que se encuentra entre el noroeste de Salamanca y el sudoeste de Zamora, y hacen de frontera con la vecina Portugal.
Arribes, arribas y arribanzos son los vocablos leoneses utilizados para denominar la geomorfología que presentan los ríos Águeda, Duero, Esla, Huebra, Tormes y Uces y que se caracteriza por una zona de depresión, siendo los arribes las pendientes escarpadas que se sitúan a ambos lados de estos ríos.
El recorrido está plagado de miradores donde ver las sorprendentes vistas que el río va marcando a su paso, y que se mezclan con las abundantes centrales hidroeléctricas y embalses existentes.
Nosotros vimos las del Salto de Saucelle, el Mirador de la Code, Embarcadero de Vilvestre y el Salto de Aldeadávila. También intentamos ver el Pozo de los Humos en Masueco, pero después de hacer un buen rato trail por caminos con una moto de 300 kilos, la cosa se puso ya fea, con caída en parado incluida, y no llegamos abajo del todo. (Hay 1km de bajada a píe desde donde se puede dejar la moto, si vas con una trail o con coche).
La peculiaridad del terreno haces que tengas que bajar mucho desnivel para acercarte al río, a veces por carreteras con pendientes infernales y a veces por caminos. Lo que hace que se pierda mucho tiempo subiendo y bajando.
Eso sí, algunas carreteras como la que te lleva al el Salto de Aldeadávila o al Salto de Saucelle son muy entretenidas para hacer en moto.
La vuelta, el navegador nos la lío un poco, y nos metimos por una serie de comarcales sin pintar, mal asfaltada y de noche, en la que se nos cruzó algún zorro, y que nos puso en prueba durante un buen rato por el frío que sufrimos.
El domingo, pusimos rumbo hacia Portugal. El navegador nada más pasar la frontera, nos metió por unas comarcales de curvas, que el hielo de las sombrías no permitía disfrutar a tope (ese día amaneció con 1ºC y todo helado). La ruta discurre cruzando pueblos típicos portugueses, con infinidad de puentes de una sola dirección, y dejando a la izquierda la Reserva Natural da Serra da Malcata, con unas vistas impresionantes.
Llegados a los albores de la Sierra de la Estrella, nos encontramos con Covilhã. Una población bastante grande y encantadora, con continuas pendientes (un sufrimiento cada semáforo en rojo) baste decir que en la misma ciudad se dan alturas de 450 y 800 metros. La ciudad fue cuna de descubridores del siglo XVI, y eso se nota en sus edificios.
Covilhã da paso a las primera estribaciones que comienzan a ascender desde los 800 a los 2.000 metros de la torre de la Serra da Estrela, punto más alto de todo Portugal. Una carretera que haces que vayas gritando debajo del casco todo el rato «que pasada», y que es un interminable zigzagueo de curvas en horquillas con vistas, y que se acompaña de lagos y de la nieve en los kilómetros finales.
Me han encantado. Seguro que no es la última vez que subo a esta zona, pero esta vez como destino único y la misión de conocer a fondo la decena de carreteras que la recorren.
De vuelta, el navegador volvió a aliarse con las carreteras más comarcales de Portugal, y nos hizo dar más vuelta que una peonza. Resaltar un tramo que me pareció espectacular, que va de Vila Velha de Rodão a Alpalhão, pasando por Nisa. increíble carretera sumergida en un bosque con el Tajo a la izquierda, que yo hice a todo meter por miedo a que nos volviera a caer la noche sumergidos en pleno bosque. Pero bonita, bonita. Y otra zona de bosque de pinos y castaños, que creo que estaba por Alpedrinha, que también habrá que volver a investigar.
Como resumen, un viaje de 1.100 kms., donde el 85% ha sido por carretera de curvas, y con paisajes sensacionales, que recomiendo visitar. En especial la Serra da Estrela, que me ha dejado una gran sabor de boca.
Dia 1. BAdajoz-Ciudad Rodrigo
Dia 2. Arribes del Duero
Dia 3. Serra da Estrela
Resumen de la ruta
Otoño en la Sierra de Aracena y Picos de Aroche
Si me sueles leer, ya sabrás que es una de nuestras zonas favoritas para disfrutar de la moto. Pero es en esta época, cuando este Parque Natural se dibuja con una paleta de colores indescriptible.
Este día bajamos desde Badajoz por la carretera BA-078, para tomar café en la localidad portuguesa de Barrancos, y enlazar por la HV-2112 a la localidad de Aroche.
El objetivo, desde aquí, es cruzar todo el Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, de punta a punta, pasando por los puntos más coloreados de este otoño.
Así, de Aroche pusimos rumbo hacia Cortegana, para posteriormente desviarnos hacia la derecha y tomar la HU-8105,hacia Almonaster de la Real, una de las grandes joyas de esta sierra.
Seguimos camino hasta llegar a la N-435 que tomamos dirección norte (dirección Jabugo) para abandonarla a los pocos metros para tomar la HV-111. Esta es una carreterita perdida y de pocos kilómetros, que cruza la pequeña población de Los Romeros, pero que tiene un encanto muy especial en esos pocos kilómetros.
LLegamos a Repilado, y ponemos dirección a Jabugo para comer en el Restaurante Las Bellotas, junto a las espectaculares instalaciones de 5J de Sánchez Romero Carvajal.
Tras comer una magnífica presa ibérica, ponemos dirección a Fuenteheridos por la N-433, y de aquí subimos a Castaño del Robledo, otra carreterita corta y perdida, que sube cruzando una explotación de Castaños espectacular.
Aquí hay dos posibilidades, o seguir camino y volver a enlazar N-435, para baja a Santa Ana la Real para tomar la increíble HU-8105. O deshacer camino y volver al cruce de Fuenteheridos hacer la bajada de Arias Montano por la HU-8121 y eso hacemos. Aquí si tomamos ya la HU-8105 dirección Aracena, que si no la conoces, te recomiendo pares a ver Linares de la Sierra.
Ruta increíble en cualquier época del año, pero que en otoño alcanza el clímax de la belleza.
Robledillo de Gata
La Sierra de Gata es siempre un gran destino. Hemos estado varias veces en la zona de Trevejo, pero no conocíamos Robledillo de Gata, y es la zona que aparece más verde en el mapa.
Así que allí fuimos. Robledillo de Gata es una localidad declarada Bien de Interés Cultural, que a mí particularmente me recordó las típica alquerías de Las Hurdes, pero de mayor tamaño.
Al pasear por sus calles empinadas, y angostas, llama la atención que algunas de ellas transcurren bajo pasadizos o casas voladas, formando pequeños túneles, proporcionando un efecto de luces y sombras.
El pueblo está rodeado por el río Arrago, y el sonido de las pequeñas caídas de agua te acompaña durante toda la visita.
Se llega por la CC-7.1,tras pasar por Descargamaría, por unas carreteras en estado deficiente y muy estrechas, quizás por ello este pueblo ha mantenido ese aire rural tan del pasado. Aquí hay que venir ex profeso, pues no hay enlace hacia otros destinos, a no ser que subas para Ciudad Rodrigo por una carretera infernal, la CV-95, por su estado y estrechez, y celestial por los paisajes que te muestra. Intentamos seguir un rato este tramo, pero tuvimos un problema de degradación del neumático trasero que desaconsejó hacer más kilómetros de la cuenta, y menos por una carretera con el suelo repleto de castañas, piedras y verdín. Es aconsejable dejar la moto a la entrada, junto al Humilladero, ya que sus calles no son muy aptas para circular en moto, y además se recorre a pie en un periquete de norte a sur.
Existe una calzada romana en esta carretera por la que pasear entre la arbolada.Toda la zona está encajonado al final del más profundo de los valles de Sierra de Gata, entre montañas repletas de pinos, castaños y robles. Muy cerca se encuentra el Chorrituelo de Ovejuela, en una ruta que dura hora y media desde la localidad de Ovejuela.
Parque Nacional de Monfragüe
La visita al único Parque Nacional de la región es una visita casi obligada. Aunque yo cada vez que lo visito, vuelvo con la sensación de que he visto parajes más bonitos en Extremadura, hay que reconocer que sólo por el espectáculo que ofrece el Salto del Gitano, con cientos de buitres sobrevolando tu cabeza, o las vista que ofrece el Castillo de Monfragüe, ya merece la pena el viaje.
Además las carreteras para llegar, si huyes de las autopistas, son muy entretenidas. Yo recomiendo subir por Cáceres y tomar la EX-390 hasta Torrejón el Rubio, entrada del parque, a la que se llega por una carretera solitaria y con algún paisaje inesperado, como al cruzar la cola del Embalse de José María de Oriol. Y volver por La Herguijuela-Serrejón hasta Almaraz. Nosotros en el camino de ida y vuelta vimos avutardas, abubillas, rabilargos y algún que otro ciervo despistado.
En el Parque, está atravesado por dos ríos, el Tajo y el Tiétar, que hacen que las panorámicas sean espectaculares.
La vuelta, como he comentado antes, la realizamos por Almaraz, y decidimos pasar Miravete como se hacía antes de la construcción del túnel, por el puerto, así que pusimos rumbo a Casas de Miravete, para ascender hasta los 666 metros, disfrutando de infinidad de curvas de herradura de un asfalto aún aceptable.
Parque Natural del Tajo. Herrera de Alcántara.
En el extremo más al oeste de la Comunidad de Extremadura, casi metido ya en tierras portuguesas, se encuentra Cedillo, destino de esta ruta, con la intención de hacerla circular y volver por Portugal.
La ruta pasa por terreno conocido como Herreruela, en la postrimería de la Sierra de San Pedro, en la que en esta época (finales de Septiembre) hay que ir con mucho ojo a primeras horas y al atardecer, porque es frecuente encontrar ciervos cruzando la carretera. Una vez alcanzada la N521, es seguirla dirección hacia Portugal.
Nos desviamos a la altura de Herrera de Alcántara para, tras pasar esta localidad, tomar una sinuosa carretera que te lleva a los pies del Tajo.
Toda esta zona se encuentra en el denominado Parque Natural del Tajo, y está formado por territorio español y portugués, siendo el propio Tajo el que actúa de frontera natural.
Es espectacular ir bajando por esa carretera de curvas, con las sorprendentes tes vista que nos ofrece el río a su paso.
Deshacemos camino, y ponemos rumbo a Cilleros. Esta localidad es la última de esta carretera, antes de pasar a Portugal, cruzando por la presa de Cilleros.
Al menos eso pensaba yo, ya que el paso en la central hidroeléctrica se encuentra cortado y restringido a personal autorizado, siendo imposible pasar a Portugal por este punto. Así que toca dar la vuelta y retroceder lo andado.
Me ha impresionado esta zona, y tengo pensado realizarla por la zona portuguesa en una próxima ruta, subiendo por Piedras Albas, ya os contaré.
Comentar que la ruta se desarrolla por carreteras ideales para la moto. Muy tranquilas sin apenas tráfico, con muy buen firme y curvas muy rápidas.
Zufre, y el porqué existen tres pueblos en Extremadura y dos en Andalucía con el apellido «de León»
Zufre es un pueblo que está en la provincia de Huelva, a los pies del Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche. En algún foro vi alguna foto bonita del mismo, y como no lo conocíamos, decidimos solucionarlo.
El día no fue el idóneo, debido a las altas temperaturas que se dieron, pero el viaje es totalmente recomendable, por lo bonito de las carreteras que se atraviesan hasta llegar.
Desde Badajoz llegamos a Fregenal por la N-435, y nos desviamos hacia Bodonal y Segura de León, para luego girar hacia la derecha dirección Fuentes de león y tomar dirección a la BA-092 hasta la población de Cañaveral de León, famosa por tener una piscina en pleno centro del pueblo.
Y he aquí que nos preguntábamos de la existencia en esta zona de cinco localidades con el apellido «de León» (las citadas Segura, Fuentes y Cañaveral, y las de Arroyomolinos y Calera). He buscado en internet, y he dado con este maravilloso artículo publicado en el Diario de León. La explicación viene de lejos ya que tras la reconquista la zona pasó a la Orden de Santiago (1247), luego a la del Temple (1283) y con Fernando IV, tras desaparecer los templarios, vuelve a la orden de Santiago para pertenecer a la Encomienda Mayor de León. Fue uno de los 122 enclaves del priorato leonés hasta que en 1833, al establecerse las provincias españolas, se dividieron, pasando Cañaveral de León, y Arroyomolinos de León al lado andaluz y a Segura de León, Calera de León y Fuentes de León les tocó ser provincia de Badajoz. Bonita historia.
De cañaveral seguimos por la HU-3124 dirección a la N433, circulando por carreteras estrechitas y serpenteantes, en una dehesa profunda y en pendiente. Muy entretenida.
Enlazamos con la citada N-433 hasta llegar a la A461 y tras 9 kms llegar a Zufre.
Viaje a los Pirineos Aragoneses
Este era un viaje largamente soñado, ya que no conocíamos la zona de los pirineos aragoneses, y que con la excusa de los BMW Motorrad Days, aprovechamos para montar una semana de vacaciones. La duración del mismo fue del 3 al 10 de Septiembre, y la única condición de mi pareja, que no le metiera kilometradas. Como soy de contentarla, organicé el viaje con dos días de aproximación, uno de ida, con parada en Burgos, y uno de vuelta con parada en Valladolid. Y ya que estábamos, como no disfrutar un día del País Vasco.
Este es el resumen y las imágenes del que ha sido hasta ahora nuestro mejor viaje en moto. Espero que os guste.
Día 3: Badajoz-Burgos. 553 kms. La parte más aburrida dela ruta. Casi todo por autovía, y con mucho viento a partir de Salamanca. Durante el recorrido es de mención la población de Simancas, una vez pasado Tordesillas, por su castillo, que fue una prisión y actualmente alberga el Archivo General del Reino y reúne en sus 52 salas más de 30 millones de documentos de la Corona de España, entre los siglos XV a XIX.
Tras una parada rápida llegamos a Burgos a mediodía. Tras comer, nos acercamos a la Catedral. Visita del todo obligatoria, ya que es una de las más impresionantes que hemos visitado, y van unas pocas ya.
En Burgos recomendable salir a tapear, muy buen ambiente por su casco antiguo, nosotros lo hicimos en La boca del Lobo, un sitio muy agradable.
Día 4: Burgos-Donostia. 247 kms. Comienza el espectáculo. A partir de este momento huimos de las autovías y nos perdemos por las comarcales. Cambia la orografía, y el paisaje se torna en verde.
La ruta coge nivel a partir de Leintz-Gatzaga, donde empezamos a disfrutar de los típicos caseríos vascos. Nuestro destino es enlazar con Deba, y disfrutar de la carretera de costa a Donostia. Desde Mondragón empezamos un juego con el río Deba, al que seguimos y cruzamos de una orilla a otra una y otra vez, acompañados de un sabor intenso a País Vasco.
Bergara, Elgóibar, Mendaro, Astigarribia hasta llegar a Deba. De la montaña al mar. Aquí seguimos la N634, y disfrutamos de Zumaia, Getaria, Zarautz, Orio, para continuar por la Ruta de la Costa Vasca y subir al monte Igueldo, donde tenemos nuestro hotel (Nicol`s hotel, un poco anticuado, sin aire acondicionado ni ascensores, pero con un encanto muy especial).
La tarde la pasamos disfrutando de Donostia. Que nivel de ciudad, sin duda una de las ciudades con más encanto de España.
Día 5: Donostia-Jaca. 200 kms. Inicialmente la idea era subir por Biarritz para volver a España cruzando, o los pirineos aragoneses por Somport, o por los navarros cruzando Roncesvalle, pero el tiempo estaba feo, y decidimos cambiar la ruta y tirar por el camino más corto.
Cuando salimos de Donostia por la A-15 nos cayó una pequeña tormenta con bastante aparato eléctrico, y es verdad lo que dicen de la RT1200, que te protege bastante del agua, no hizo falta ni sacar los trajes de agua. Llegados a Pamplona el tiempo cambió, y salió el sol. Aprovechando la circunstancia para visitar la ciudad y tomar un café.
Seguimos ruta para Jaca, pasando por el embalse de Yesa, de un espectacular color turquesa. La montañas del horizonte se hacen más abundantes y más altas. Estamos en el pre-pirineo.
LLegamos a Jaca a la hora de comer, mucho ambiente de excursionista y montañeros, pocas motos todavía, aunque alguna se ve ya. La tarde se pone fea, viento y agua. Nos registramos en el hotel, (Apartahotel Jacetania, magnificas instalaciones con buena calidad/precio), y compramos algunas viandas para la cena y el desayuno.
Día 6: Ruta QH. 211 kms. Como ciclista que soy, se que donde hay ciclistas hay bellos paisajes. Y esta regla se completa con la siguiente: a mayor acumulación de ciclistas, mayor belleza. Pues imagina como debe ser una ruta en la que se concentran todos los años 11.000 ciclistas. Sólo teníamos que seguir el recorrido de esta carrera y teníamos asegurado el disfrute.
El día levantó con dudas, pero sin lluvia. Salimos dirección de Candanchu, parando en Canfrac-Estación para disfrutar de estas instalaciones. Para llegar no hay que tomar el túnel de Somport, sino desviarse hacia la derecha.
Cruzamos a Francia por el Col de Somport, parando antes en Astún para ver las vistas. Seguimos por Urdos y nos desviamos para subir a Lescun, impresionantes vistas desde arriba.
Llegamos a Escot y nos desviamos a la derecha por la D294, para subir el puerto de Marie-Blanque, por una carretera estrecha llena de ciclistas y algunas vacas pastando a borde de carretera.
Llegamos a Bilhères y giramos a la derecha hacia Bielle y bajamos hacia Laruns, hasta subir el col de Portalet, que parece un paisaje lunar frente a tanto verde anterior, para entrar de nuevo en España.
Seguimos por la A136 hasta Sallent de Gállego, donde paramos a comer. El tiempo se estropea y salimos bajo la lluvia hacia Jaca.
Día 7: 250 kms. Volvemos a Sallent de Gállego para terminar el recorrido que quedó pendiente el día anterior por la lluvia. Recorremos el lago de Lanuza, impresionante vista desde el embalse.
Seguimos hacia Baños de Panticosa, donde el cielo es de un azul intenso. Se respira una tranquilidad increíble, a pesar de lo alta que vienen las pulsaciones tras tanta curva de herradura.
Seguimos bajando hacia Jaca, y nos asomamos a Tramascastilla de Tena. Precioso pueblo enclavado en un paraje único donde disfrutar la belleza del entorno, con el pantano Búbal a sus pies.
A la altura de Biescas giramos a la izquierda, dirección Gavin. Seguimos la N260 hasta llegar a la población de Torla-Ordesa. Como he comentado, todo el entorno de las zonas que hemos recorrido sobrecoge por su grandiosidad infinita, pero es en este punto, frente al Monte Perdido de Ordesa, donde te sientes insignificante ante la grandiosidad de lo que te rodea, a la vez que importante por poder disfrutar de estas impresionantes vistas. Descomunal.
Retomamos la N260 para comer en la localidad de Broto, cruzada por el río Ara, otra preciosidad. Tras reponer fuerzas seguimos hacia Fiscal, haciendo parada en Asín de Broto, pequeña localidad que se ve que están recuperando.
A partir de Fiscal, el río Ara cambia de color, tornándose a un bello turquesa que termina pleno en Aínsa, al unirse con el río Cinca y parar a descansar en el embalse de Mediano.
Todo ese recorrido se hace por una carretera estrecha, con continuas curvas y bastante tráfico, sobre todo de caravanas, por lo que hay que tener cierta precaución. Por cierto, ya comienzan a verse motos por todos lados, lo que nos recuerda que esta tarde comienzan los BMW Motorrad Days (más conocida por los moteros como la Rider).
Llegamos a Aínsa. Catalogado como uno de los pueblos más bonitos de España, es una villa medieval declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1965, por la que hay que dar un paseo y disfrutar de sus viejas calles, su castillo (S. XI – XVII), la muralla y la preciosa plaza Mayor.
Tras el paseo ponemos rumbo a Sabiñanigo para inscribirnos en la Rider y asistir a la charla del amigo Isaac Feliú. Un auténtico crack.
Día 8: 306 kms. Nos vamos a la Rider. Hay motos por todos lados. Damos una vuelta. Saludamos a los amigos de ROM que tienen stand en la Rider, gracias por el porta llave Edu, compramos algún recuerdo y disfrutamos de las preparaciones de las BMW clásicas.
Hay mucho ambiente. Tras ver los distintos stand, decidimos que hace un día muy bonito para no disfrutar del entorno, y ponemos rumbo a Aínsa. Las carreteras están plagadas de motocicletas, menudo ambiente. Comemos en Aínsa y ponemos rumbo a la A138 para bordear el embalse de Mediano y el embalse del Grado.
Subimos a Torreciudad, y ponemos rumbo a Graus, donde visitamos la Basílica de la Virgen de la Peña.
Se nos ha ido de las manos, y nos damos un pequeño tute por pequeñas carreteras comarcales hasta llegar de nuevo a Aínsa, y de aquí rumbo a Jaca por Fiscal.
Día 9: 474 kms. Jaca-Valladolid. Esto se acaba. Hacemos la maleta y ponemos rumbo a Valladolid, como siempre huyendo de las autovías. A poco de salir veo un cartel de una desviación hacia el Monasterio de San Juan de la Peña. Este monasterio fue el más importante de Aragón en la alta Edad Media y en su Panteón Real fueron enterrados un buen número de reyes de Aragón. Forma parte del camino aragonés del Camino de Santiago. Sólo son 10 kms, lo vemos? venga dale. Al final resultan 10 kms. de subida incesante, en un bello entorno de pared rocosa y bosque. Una hora perdemos. Pero el enclave merece la pena por su peculiaridad.
Tras proseguir la marcha, pongo en el navegador una recomendación de mi amigo Andrés. «visita Olite, no te defraudará». Buena recomendación, a pesar de que nos tenemos que desviar bastante de la ruta lógica. Olite es una pequeña ciudad situada en el centro geográfico de Navarra, a 42 kilómetros al sur de Pamplona, en el que sobresale la silueta esbelta y armoniosa de su castillo-palacio, sede real durante la Edad Media. Merecen la pena los kilómetros de más, y eso que ya empiezan a pesar.
Comemos en Logroño y ponemos rumbo a Valladolid.
Día 10: 409 kms. Valladolid-Badajoz. Esta parte la realizamos por completo por autovía y del tirón, sólo parando a repostar gasolina.
Al final nos han salido 2.647 kms, con 33 horas encima de la moto, un consumo de 5.5 l/100 que han supuesto un gasto de 197€ en gasolina.
En resumen un viaje espectacular.
Rutas por descubrir. Enlaces a otras rutas
En esta página encontrarás rutas en motos que han realizado otros moteros, o recomendadas por administraciones, o que simplemente me han parecido interesantes.
1. Ruta Vía de la Plata.
Es un enlace a una página donde distintos moteros han propuesto rutas en entornos cercanos de la vía de la Ruta de la Plata. Muy interesante.
2. Rutas en moto por As Rías Baixas
En esta página de la diputación de Pontevedra te propone cuatro rutas diseñadas para descubrir As Rías Baixas en moto. Esta la tengo ya apuntada en la agenda para esta primavera.
http://turismoriasbaixas.com/es/web/portal-web/rutas-en-moto-por-as-rias-baixas
3. N2. La ruta 66 portuguesa.
Recorrer Portugal de norte a sur en moto por una única carretera es posible, gracias a varios alcaldes portugueses que buscan convertir este trayecto en una ruta turística inspirada en la «Route 66» estadounidense permitiendo promover los atractivos de las diferentes regiones del país luso.
La vía elegida es la Nacional II, conocida como EN2, una carretera que serpentea por la espina dorsal del país a lo largo de 739 kilómetros entre las localidades de Chaves (norte), en la frontera gallega con Verín (Ourense) y Faro (sur) siendo la única que recorre el territorio nacional de extremo a extremo. Aunque sea más modesta que la legendaria «Route 66» (3.939 kilómetros), la EN2 encierra muchísimos encantos. Otra ruta que está en mi recámara.
4. Una aproximación a los Picos de Europa
Otra de las rutas que haremos antes que tarde. Me gusta esta página de Luis C. Melero y su propuesta para los Picos de Europa, habrá seguro otras alternativas, pero me parece una buena aproximación para empezar….
http://www.moteando.com/una-aproximacion-a-los-picos-de-europa/
5. Página web de Javier Soto Vázquez
Página web del fotógrafo Javier Soto, en la que se mezclan preciosas rutas con magníficas fotografías. Un autentico placer para los sentidos….
Parque Natural da Arrábida
Situado entre Setúbal y la localidad de Sesimbra, el Parque Natural da Arrábida tiene una belleza incomparable, donde el azul del mar se combina con los tonos claros de los acantilados y con el verde que cubre la Sierra.
Relativamente cerca de Badajoz, realizamos la ruta por la antigua carretera N4, solo tomando la autopista ya en las proximidades de Lisboa.
El parque nacional de la Serra da Arrábida cubre 110 kilómetros cuadrados y se extiende desde Setúbal al este, hasta Cabo Espichel al oeste. El parque se caracteriza por empinadas colinas, repletas de curvas, cubiertas de densos matorrales perennes (Ceratonia silique y Quercus coccifera), que dota de una apariencia de verdor a la región durante todo el año.
El encuentro de la sierra con el mar originó un cordón de pequeñas playas de arenas finas y aguas transparentes, como Figueirinha, Portinho da Arrábida, entre las que destaca la Praia dos Galapinhos que está considerada como una de las mejores playas de Portugal, debido a su idílico paisaje y aguas de color turquesa.
Parte del recorrido de este parque sólo está permitido a motos y bicicletas (supongo que sólo en periodo estival), por lo que te puedes imaginar el ambiente motero de algunas playas.
Aprovechando la visita nos acercamos al Cabo Espichel, el punto más meridional de la desembocadura del río Tajo, cuyo recorrido se hace un poco pesado, por el mal estado de las carreteras (a veces inexistentes). Es un páramo agreste y desolado situado en el extremo sudoeste de la Península de Setúbal, barrido por el viento, y gigantescos acantilados que son azotados incesantemente por las olas del Océano Atlántico.
Destaca en la zona el precioso faro de 32m de altura que data de 1790. En las noches claras, la luz del Faro del Cabo Espichel puede verse a 35 km mar adentro.
Se puede visitar el Santuario de Nossa Senhora y el alojamiento de los peregrinos
así como la pequeña capilla de Ermida da Memória. Hay también distintos restos de pisadas de dinosaurios (Pedra da Mua y Lagosteiros) que son visitable.
La Covatilla
La ruta era inicialmente hasta Hervás, pero con eso de que estábamos de semi-estreno, ampliamos a Candelario, y ya que estábamos… hasta La Covatilla.
La ruta comenzó cruzando el puerto de Honduras desde Cabezuela del Valle, (bueno, lo interesante de la ruta, que ya llevábamos 200 km desde Badajoz), disfrutando de los cerezos cargados de fruto. No deja de sorprenderme lo bonita que es la parte final de la bajada del puerto de Honduras, con la carretera totalmente cubierta por la arboleda.
Tras visitar y comer en la localidad de Hervás (muy recomendable el restaurante Nardi), tomamos la carretera EX205 hacia Candelario.
Carretera preciosa, aunque el asfalto deja bastante que desear, merece la pena bajar el ritmo para ir ascendiendo curva tras curva y disfrutar de un paisaje que te deja sin aliento.
Una vez en Candelario seguimos hacia La Hoya para girar a la derecha hacia la estación de esquí de La Covatilla. No había subido nunca a La Covatilla y la verdad es que tampoco ha sido el puerto de mi vida. Muy descarnado durante toda la subida, yo soy más de los puertos con más presencia de arboleda. Al menos el asfalto está en magníficas condiciones.
Nueva compañera
Después de muchas satisfacciones con la anterior BMW F800GS, llegó la hora del cambio. Le he dado muchas vueltas, pero creo, después de unas semanas de experiencias, hemos acertado de pleno. Tenía dudas sobre si el paso lógico no sería la superventa R1200GS, pero tras analizar el uso que le hemos damos a la GS800, y al que queremos darle a la nueva adquisición, creo que la RT era la opción más racional.
Tras 2.200km realizados, confirmar que esta moto es una devora millas. Tiene una protección aerodinámica tan estudiada que no sientes el viento a alta velocidad. Da una seguridad y un aplomo que desde el inicio la sientes como tu moto de toda tu vida. A pesar de los 273 kg. que pesa, se maneja con una facilidad que no se espera viendo los volúmenes de la moto.
El motor boxer, viejo conocido por mi, ha mejorado en tacto y confort. Ya nada queda de la rudeza e inercias que transmitía la magnifica 1150 GS. Es todo dulzura. Con ese sonido a medio régimen que tanto enamora. Por contra, a bajo régimen y sobre todo a ralentí, el sonido mecánico que emite el boxer no es de lo más agradable y el cambio sigue siendo tan ruidoso como en todas las BMW que he tenido, sobre todo la primera, pasando a ser suave siempre que cambies por encima de las 4.000 rpm. Habrá que tomarlo como un signo de identidad de la marca.
estéticamente es una moto que no deja indiferente, o te enamora o la odias. A mi, evidentemente, me encanta, sobre todo su frontal, con esa mirada de enfado que tanto impresiona.
Ya la hemos bautizado…Alpina, por su color Blanco Alpino,…y porque el año que viene nos llevará a los soñados Alpes….
Sierra de Grazalema
La ruta de los Pueblos Blanco de la serranía de Cádiz es bien conocida, pero nunca deja indiferente. Existen cientos de rutas en las que encontrar carreteras donde el ingeniero olvidó que las rectas también existen, o quizás las diseñó un aficionado a las motos. En ellas todo consiste en ir surfeando de derecha a izquierda, dejándote envolver por la naturaleza más imponente.
Nosotros decidimos no pisar autopista en toda la ruta. Así que salimos de Badajoz con dirección a Llerena, y de ahí cruzar la Sierra Norte de Sevilla, por Guadalcanal, Alanís, San Nicolás del Puerto, Constantina hasta Lora del Río. A partir de ese momento, la serranía cambia por campos de cereal y girasoles, dando efecto calidoscópico a la ruta, pasando del verde al ocre y del ocre al amarillo, y siempre acompañado por ingente cantidad de flores rojas, violetas y lilas que nos acompañan en toda la ruta.
Llegamos a Carmona a la hora de la cerveza, y aprovechamos para dar una vuelta por tan prestigiosa localidad, y comer algo. Ciudad de visita muy recomendada.
De Carmona ponemos rumbo a Grazalema, pasando por distintos pueblos de la comarca de Sevilla, para entrar en la sierra por el puerto del Boyar, que une El Bosque con Grazalema, y que sube hasta los 1.100 metros.
Nos hospedamos en el Hotel Fuerte de Grazalema, totalmente recomendable, con unas vistas espectaculares de la sierra.
Al día siguiente salimos temprano hacia el objetivo primordial de este viaje, subir el Puerto de Las Palomas.
Nos dirigimos por la A-2300 bordeando el Pantano de Zahara hasta llegar al pueblo de Zahara de la Sierra, seguramente unos de los pueblos más bonitos de la comarca.
Tras las fotos de rigor, y tener que desandar parte de lo rodado, ya que por las lluvias hay un trozo de carretera cortado de la CA-9104, enlazamos con la misma y comenzamos la infinita ascensión al puerto, siempre acompañado por las vista del pantano, y en compañía de infinidad de motos que nos cruzamos a nuestro paso.
Hay que tener precaución ya que es una zona muy frecuentada por ciclista, que ruedan bastante lento ante los importantes desniveles de esta ruta.
Este puerto es de los más bellos que he cruzado, y debe de estar muy cerca a la sensación de subir los grandes puertos de Europa, pronto lo comprobaremos. Rodar entre bosques de pinos, coníferas y de los famosos Pinsapos, es toda una sensación. Entiendo que esta sea una zona de culto para los moteros de Cádiz y Málaga, que lo frecuentan. Tras coronar este puerto seguimos ruta hacia Villaluenga del Rosario, cuna del queso Payoyo, Benaocaz y Ubrique, por carreteras de infinitas curvas, y con constantes ramilletes de flores en sus cunetas.
Parada para una cerveza, y seguimos hacia Cortes de la Frontera, ya en la provincia de Málaga, cruzando el Parque Natural de Los Alcornocales (esta localidad se encuentra en la confluencia de los parques naturales de Los Alcornocales, Sierra de Grazalema y la Sierra de Las Nieves).
Comemos en esta agradable localidad y seguimos por la MA-8401 camino de Júzcar, el famoso pueblo pitufo, que si soy sincero, tampoco tiene mucho que ver, pero para llegar pasas por carreteras comarcales espectaculares que cruzan Jimera de Libar, Atajate, Alpandeire y Faraján. Después desandar gran parte de lo recorrido y poner destino, vía Ronda, hacia Grazalema.
El último día decidimos dar un paseo por Ronda, antes de dirigirnos hacia Setenil. Salimos de Grazalema por la A-372, otra pasada de carretera, para enlazar con la A-374 que te lleva directamente a Ronda.
Ronda es una ciudad que nunca te cansas de visitar, con un sabor entre corrida goyesca y bandolero. Preciosa ciudad, de la que da fe la cantidad de japoneses que recorren sus calles. Tras dar una vuelta por la ciudad, ponemos rumbo a Setenil por la MA-7402, carretera un poco cansina, aunque también empiezan a notarse los kilómetros que llevamos.
Setenil supera mis expectativas, que no eran demasiadas, es verdad, y es un lugar muy recomendable de visitar. Super turística, pero agradable, y muy, muy curiosa.
Después de tomar una cerveza, comenzamos la larga ruta de vuelta, que nos lleva por Olvera y Pruna hasta Morón, donde paramos a comer. Para seguir por Arahal a Carmona, donde nos regalamos con una parada en su monumental Parador, y disfrutar de un café en su patio árabe, de donde nos cuesta bastante levantarnos para seguir.
Lora del Río y Sierra Norte nos espera, esta vez sin lluvia, para acabar esta espectacular ruta de 1.100 kilómetros, que sirve de despedida de la magnífica GS800. Hemos disfrutado mucho con esta maravilla de moto…espero que la nueva esté como mínimo a su altura.
Minas de Riotinto
Ruta interesante, no solo por lo curioso de las minas, sino porque el recorrido hasta llegar a Riotinto, por la N-435, es una maravilla para los sentidos.
Las minas de Riotinto se encuentran próximas al Parque Natural de Aracena y Picos de Aroche, que si has leído un poco en este blog, sabrás que es zona habitual de nuestras rutas, y muy concurrida por los moteros extremeños y andaluces.
Estas minas que conocieron su mayor apogeo durante la propiedad británica en 1873, tiene como dato anecdótico en su historia la celebración de la primera manifestación con carácter medioambiental de las que se tiene noticia en España. La misma se realizó el 4 de febrero de 1888, como protesta a las calcinaciones de minerales al aire libre, denominadas «teleras», por sus emanaciones sulfurosas. A ella asistieron miles de personas venidas de toda la comarca, y acabaron con la muerte de más de cien personas debido al fuego que abrieron sobre los manifestantes, concentrados en la plaza de la Constitución, fuerzas del Regimiento de Pavía, desplazadas desde Málaga, siguiendo órdenes del gobernador civil de Huelva. El poder de la compañía influyó para que estos graves sucesos pasaran prácticamente desapercibidos en el resto de España. La escritora Concha Espina en 1920 publicó «El metal de los muertos», reflejando las reivindicaciones obreras tras la masacre.
Actualmente el yacimiento de Cerro Colorado esta activo, gestionado por la empresa minería chipriota Atalaya Mining, por lo que se pueden observar los inmensos volquetes Komatsu transportando mineral.
Tras la vista a los distintos museos y al pueblo inglés, lo más aconsejable es subir a comer a Aracena, y luego disfrutar de la «famosa» HU-8105, y parar a conocer el pueblo de Linares de la Sierra.
Monsanto
Monsanto es una aldea singular construida en lo alto de un monte de granito que domina una vasta extensión de dehesa mediterránea.
En las últimas décadas, Monsanto se volvió popularmente conocida como «a aldeia mais portuguesa de Portugal» (la aldea más portuguesa de Portugal), exhibiendo el Gallo de Plata, trofeo de autoría de Abel Pereira da Silva, cuya réplica permanece hasta hoy en la cima de la Torre del Reloj de San Lucas.
Se encuentra en la cuesta de una gran elevación escarpada, llamada Cabeço de Monsanto. Lo curioso es que el monte está compuesto por enormes domos de granito que han ido rodando ladera abajo desde hace siglos, como si de una bolera para gigantes se tratara.
Fue D. Sancho I quien repobló y reedificó la fortaleza que, entre tanto, fue destruida en las luchas contra el Reino de León. Serían nuevamente reparadas un siglo más tarde, por los Templarios.
En 1165, el lugar de Monsanto fue donado a la Orden de los Templarios que sobre las orientaciones de Gualdim Pais, cruzado portugués, fraile templario y caballero de Alfonso I de Portugal, se reconstruyó el Castillo de Monsanto.
La ruta desde Badajoz se realiza en su mayor parte por zonas de dehesa espectaculares, siendo especialmente bonito el tramo de la EX108 hasta Penha Garcia.
Ruta de los Castillos de Badajoz
Hay infinidad de castillos para poder visitar tanto en la provincia de Badajoz como en la de Cáceres. Esta es una ruta para pasar una mañana disfrutando de las dehesas de la zona de la Sierra Vieja de Feria.
Llegamos al Castillo de Feria, del que destaca fundamentalmente su enorme torre del Homenaje, de planta cuadrada y esquinas redondeadas. Todo el recinto se encuentra en lo alto de una elevación, por encima del pueblo de Feria, que domina toda la zona y donde las vistas son realmente impresionantes. De hecho, la fortaleza de Feria tenía visión directa con los castillos de Villalba de los Barros, Zafra y Nogales, situados estratégicamente para controlar y defender todo el territorio de los Suárez de Figueroa, por señales ópticas mediante fuego o reflejos del sol.
De aquí partimos por la sinuosa carretera EX-320 hasta la población de Burguillo del Cerro, en el corazón de la dehesa. De origen musulmán, la fortaleza se construyó por la necesidad de la población de los distintos burgos o burguillos de las inmediaciones, acosados por el asedio de los cristianos, siendo seguramente ellos, los pobladores de estas pequeñas aldeas, los constructores del castillo. Destacan dos torres principales, llamadas Torre Parda y Torre del Homenaje.
Salimos por la BA-031 dirección Nogales, pasando por el castillo de Salvatierra y disfrutando de los paisajes y curvas que posee esta carretera, hasta llegas a Nogales.
El castillo de Nogales está francamente bien conservado, sorprende por una esbelta torre del homenaje rodeada por una muralla, ambas de planta cuadrada, y una única puerta a la que se tenía acceso a través de un puente levadizo que permitía atravesar el foso que rodeaba al castillo, hoy desaparecido.
Ruta de los tres valles
Consiste en cruzar los conocidos valles del norte de Cáceres, Valle de Ambroz, Valle del Jerte y La Vera, atravesando los dos puertos de montaña que los comunican, El Piornal y Honduras.
Es una zona de sobras conocidas, pero no por ello menos interesante, y sobre todo en determinadas fechas, con multitud de caídas de aguas a lo largo de toda la ruta.
Nosotros salimos de Badajoz, por lo que la ruta se fue a unos 490 kilómetros, pero la parte interesante, que es desde Plasencia, son unos 160 kms. Lo realizamos desde la zona de la Vera, atravesando la EX-203 hasta llegar a Cuacos de Yuste. Se puede hacer desde Jaraíz hacia Garganta la Olla, pero recomiendo la subida al Monasterio de Yuste, que son pocos kilómetros más, y la carretera y el paisaje son espectaculares. Una vez llegado a Garganta la Olla hay que buscar la CC-17.4 dirección al pueblo de Piornal. Es un puerto muy arbolado hasta casi al final, en el pueblo de Piornal, el más alto de Extremadura, con una altura que llega a los 1.175 m.
Desde este punto bajamos en dirección Valdastillas por la CC-17.5 entre plantaciones de cerezos, con parada recomendada en la Cascada del Caozo.
Pasado Valdastillas, nos dirigimos a la N-110, ya en pleno Valle del Jerte, y subimos dirección Cabezuela del Valle, para inmediatamente recién pasado, girar a la izquierda e incorporarnos a la CC-102, que nos llevará al puerto de Honduras.
Puerto de unos 16 kilómetros, con vistas impresionantes del valle, con las nieves de la Sierra de Gredos al fondo.
Bajamos el puerto para situarnos en pleno Valle de Ambroz, en la población de Hervás.
EXTREMADURA DESDE MI MOTO 